Este lunes 03 de octubre y en el marco del Día del Hospital, se dio inicio al aniversario número 111 del Hospital Barros Luco Trudeau, centro de salud base de la zona sur de la Región Metropolitana y uno de los más grandes del país.

En la oportunidad y en el marco de una breve ceremonia que fue encabezada por el Subdirector Médico de Atención Cerrada (s), Dr. César Santis, se enfatizó en los grandes avances que ha presentado la institución, como así también en los desafíos que en los cuales se debe avanzar.

Sobre esta base, el subdirector aseguró que progresivamente la gestión debía ser acompañada de acciones que permitieran a las y los trabajadores, desenvolverse en condiciones cada vez mejores.

“Tendremos que potenciar nuestro enfoque hacia el paciente, resolviendo listas de espera, mejorando infraestructura, optimizando los servicios clínicos y administrativos, incrementando el gasto en salud mental y, por cierto, cumpliendo con el copago cero y la rehabilitación de los pacientes afectados por covid-19, la cual, desde este mes, es parte de las garantías explícitas de salud, ges”, dijo.

Revisa a continuación las palabras del Dr. César Santis, Subdirector Médico de Atención Cerrada (s).

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Historia del HBLT

El Hospital Barros Luco es un establecimiento de alta complejidad que incluye un Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) y entrega atención en más de 30 especialidades médicas y odontológicas a usuarios de la red sur. Además, es macrorred de la V y VI regiones en patologías GES y no GES y es prestador aprobado de 15 problemas de salud contenidos en Ley Ricarte Soto. También es referente nacional de Esclerosis Múltiple y cuenta con el primer Centro de Alergias de la red pública del país.

Sin embargo, el centro asistencial tiene su génesis en 1888, cuando José Manuel Balmaceda era Presidente de Chile, período en el cual se propuso al gobierno la edificación de un hospital en el sector sur o sur poniente de la ciudad.

Esta posibilidad se discutió en el seno de la Junta de Beneficencia durante 10 años. De esta forma, el presidente manifestó la intención de financiar en un corto plazo la construcción del hospital, proyecto que se transformó en Ley, el 16 de enero de 1901, en que la Junta de Beneficencia solicitó propuestas para adquirir terrenos para el futuro hospital. Los terrenos adquiridos fueron de una chacra denominada “El Mirador del Gallo”, que comprendía parte de lo que hoy es el Club Hípico de Santiago.

El proyecto quedó en espera hasta agosto de 1908, en que se recibe como donación de Doña Silvia Hurtado, una chacra conocida como La Cuadra, en el sector El Llano -Subercaseaux, en donde finalmente se decide construir el hospital bajo los planos del arquitecto alemán Frederick Ruppel.

En este diseño se contemplaba una dotación de 796 camas para los diversos Servicios, así como edificios especiales para la casa del Médico Director, Posta de Primeros Auxilios, Desinfectorio, caballerizas, cochera, etc. En marzo de 1909, la Junta de Beneficencia aprobó el informe de la comisión de construcción del hospital, con planos confeccionados por el Arquitecto

En definitiva, La primera piedra fue colocada el 24 de septiembre de 1911, en una ceremonia encabezada por el Presidente Ramón Barros Luco y bajo la bendición del Arzobispo de Santiago, Monseñor Juan Ignacio González Eyzaguirre.