La Unidad de Medicina Materno Fetal, UMMF, llevará su nombre

Mientras el Dr. Ernesto Perucca Páez, subdirector Médico de Atención Cerrada del Hospital Barros Luco Trudeau se reunía en oficinas del Servicio de Ginecología y Obstetricia para analizar un supuesto “proceso administrativo pendiente”, decenas de funcionarios y funcionarias del centro asistencial llegaban a la Unidad de Medicina Materno Fetal, UMMF, para ser parte del descubrimiento de una placa en homenaje al médico que tras 42 años de servicio público anunciaba su retiro.

Entre sus pares, el gineco-obstetra es ampliamente reconocido por su faceta docente, la que lo llevó a realizar más de 80 publicaciones científicas sobre trasplante renal y preclamsia, entre otras, y además también por su profundo perfil técnico y humano.

Ernesto Perucca comenzó su carrera en Parral, en la Región del Maule, como Médico General de Zona. Luego, en 1980, comenzó a hacer su beca en el Hospital Barros Luco, centro asistencial en el que desarrolló toda su carrera. Fue residente, jefe de turno y de servicio en el Servicio de Ginecología y Obstetricia y en 2010 asumió como subdirector médico, cargo en el que se mantuviera hasta este jueves.

Además, fue miembro de la directiva de la Sociedad Chilena de Ginecología y Obstetricia y en 2011 estuvo a cargo de la creación de la Unidad de Hospitalización Domiciliaria del centro asistencial, la cual se inició con cuatro pacientes, alcanzando a la fecha los 250 cupos.

“Desde hoy, la sala de la Unidad de Medicina Materno Fetal, UMMF, recibe el nombre “Dr. Ernesto Perucca Páez” en reconocimiento a su trayectoria y profunda vocación de servicio público. Queremos que las generaciones que vienen de funcionarios y funcionarias de la salud sepan quién fue él y aprendan del legado que nos deja”, aseguró la Dra. Gisella Castiglione Veloso, Directora del centro asistencial.

Desde el Servicio de Salud Metropolitano Sur, su director, el Dr. Mario Moreno, también se refirió al trabajo del gineco-obstetra. “Ernesto durante su trayectoria se caracterizó por enfocarse siempre en los pacientes, buscando entregar un servicio oportuno y de calidad. Estamos agradecidos de haber contado con su colaboración permanente y en lo personal, contento por esta nueva etapa de quien trajera a uno de mis hijos al mundo”, dijo. 

“Me enamoré del servicio público”

Ernesto Perucca, confiesa, recibió en los años 90 un importante ofrecimiento para irse al sector privado, sin embargo, su decisión fue quedarse en el público. “Mi convicción siempre ha sido la de estar a disposición de las personas y en el sistema público están quienes más requieren del compromiso de las y los trabajadores de la salud”, dice el ex subdirector, quien vivió momentos históricos en el hospital.

Uno de ellos fue el terremoto de 1985. “Ese día estuve de turno y hubo que reorganizar, en la maternidad antigua, todo el servicio de nuevo. Fue ahí que me di cuenta del perfil del funcionario; trabajador, muy humano y, sobre todo, comprometido”, asegura el médico.

A sólo horas de su último marcaje, Perucca abordó el futuro de la salud en Chile. “La pandemia golpeó profundamente al sector y agudizó el problema de las listas de espera. Tanto las autoridades como las nuevas generaciones deben avanzar en su resolución, de manera integrada y colaborativa, pero siempre anteponiendo la consciencia social por sobre todas las cosas”, dice el ahora ex subdirector, quien concluye, parafraseando al sacerdote jesuita Alberto Hurtado: “Hoy en Chile debemos dialogar, hasta que duela”.

Revisa a continuación el video de su despedida: